martes, 26 de enero de 2010

Que seria de mis manos
sin el deleite de las comisuras
de tu largo tallo;

que seria de mi boca,
sin el sabor de tus raíces.

Que seria de mi olfato,
sin el dulce perfume que emana
de tu vientre;

que seria de mis ojos
sin esos soles que contigo amanecen.

Dime que seria de este
pobre errante,
de esta carcasa de incertidumbre;

que seria de la poesía
sin la atracción que en ella ejerces.

3 comentarios:

  1. Una atracción preciosa,
    si te hace escribir lo que escribes.
    Un abrazo con todo mi cariño.

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  2. La poesía que me me dictan tus manos,
    es más exquisita que el más intenso de los versos...

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  3. que sería del silencio, si tu voz no lo encuentra.

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